Por Voz de America
Hace un año se adoptó en El Salvador el uso del bitcóin como moneda de curso legal. Durante los primeros meses hubo gran expectativa, pero una reciente encuesta sugiere que los salvadoreños ahora desaprueban la medida.
Una puntuación de 4,61 en una escala del 1 al 10 fue la evaluación que los salvadoreños dieron al bitcóin, según la más reciente encuesta del Instituto Universitario de Opinión Pública, de la Universidad Centroamericana (UCA).
“Es la medida más impopular del gobierno de Nayib Bukele, la más criticada y la peor evaluada”, afirmó el rector de la Universidad Centroamericana, Andreu Oliva.
A mediados de 2021 el gobierno de Bukele aprobó la circulación de la popular criptomoneda, argumentando que esto le adjudicaba el poder de aportar soluciones inmediatas a los problemas económicos de los salvadoreños.
Transcurrido un año, no ha sido así. La moneda virtual se desplomó y su valor cayó a mínimos históricos. Según la encuesta, 77 de cada 100 salvadoreños opinan que la medidaa sido un fracaso.
“Para mí, creo que no fue una buena idea, de hecho, hasta ahora ya murió el bitcóin, únicamente está en las playas, donde llegan los turistas y usan esa moneda, pero hasta ahí”, explica Jesús Sánchez, un comerciante salvadoreño.
Se estima que el gobierno de El Salvador ha adquirido 2.381 bitcóins con fondos públicos, que sumarían más de 100 millones de dólares. Sin embargo, no hay claridad en los datos.
“En la implementación del bitcoin y en la forma como fue discutida también la regulación, creo que hubo poca transparencia. Esto, pues, al final, también creo que pudo haber provocado en la población más desconfianza”, asevera Laura Hernández, abogada especialista en tecnologías.
La encuesta también reveló que un 75 % de los salvadoreños no ha utilizado el bitcóin hasta la fecha, y solo un 3 % dijo que su situación económica ha mejorado con su uso. Algunas personas piensan que la idea no era mala del todo.
“Tal vez si toda la gente siguiera usándolo, sí hubiera sido una magnífica, excelente idea”, valora Mirna Aguilar, una comerciante salvadoreña.
El estudio refleja que la mayoría de los salvadoreños cree que el mandatario Nayib Bukele no debería seguir gastando dinero público en comprar esta moneda.