El funcionario de la OIM dijo que «llama mucho la atención los perfiles» de los hondureños que están saliendo de su país en caravana, una modalidad que se inició en octubre de 2018.
Por Revista Summa
El anhelo de mejores condiciones de vida, la reunificación familiar y la violencia en su país, son las principales razones por las que los hondureños emigran hacia Estados Unidos y España, indicó un estudio de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
«Las causas de la migración, según reportan los migrantes, son en su mayoría las condiciones económicas; sin embargo, en los últimos años se han registrado causas como la reunificación familiar y violencia», indica el estudio, denominado «Perfil Migratorio de Honduras».
La investigación fue presentada en Tegucigalpa a diversos sectores por Roberto Canizales, coordinador de la OIM en el país centroamericano.
Desde la década de 1980, Estados Unidos es el principal país de destino de los emigrantes hondureños debido a «los lazos históricos, económicos, políticos y culturales, así como la proximidad geográfica», señala.
Según autoridades de Tegucigalpa, en Estados Unidos viven alrededor de un millón de hondureños, entre residentes legales e indocumentados.
La crisis económica de Honduras, la necesidad de mano de obra para labores de cuidado de personas en España y los cambios en la ruta migratoria, ha llevado en las últimas dos décadas a más de 90.000 hondureños, en su mayoría mujeres, a emigrar hacia ese país europeo, agregó la OIM.
El éxodo de mujeres hondureñas «deteriora los mecanismos de seguridad familiar, pero potencia el cuidado en los países de acogida», y puede repercutir en un aumento de la migración de menores, destaca el documento.
RADIOGRAFÍA DE LA MIGRACIÓN
El perfil migratorio, elaborado en conjunto por la OIM y la Secretaría de Relaciones Exteriores y de Cooperación Internacional de Honduras, presenta una «radiografía completa» sobre el «escenario muy complejo de la migración» de hondureños, indicó a Efe Canizales.
La investigación recoge información sobre las diferentes formas de movilidad en Honduras, como la migración irregular en caravana, el desplazamiento interno y forzado, y el tránsito de extranjeros, añadió.
El funcionario de la OIM dijo que «llama mucho la atención los perfiles» de los hondureños que están saliendo de su país en caravana, una modalidad que se inició en octubre de 2018 en la ciudad de San Pedro Sula, norte de Honduras.
En los últimos años, muchos de los hondureños que decidieron emigrar de manera irregular «poseían un trabajo (en su país), pero la condición del empleo era en condiciones de precariedad o no se traducía en una mejora de su vida, o tenían bajos niveles educativos», explicó.
Sin embargo, el perfil de los hondureños que abandonan su país con la idea de llegar, principalmente, a Estados Unidos ha cambiado en los últimos años.
«Estamos viendo un incremento de (personas de) hogares no pobres participando en procesos migratorios a raíz de los vínculos que tienen con familiares en Estados Unidos, recibir remesas, lo cual incrementa la posibilidad de migración», subrayó Canizales.
El experto afirmó que la situación económica del país, la falta de oportunidades y empleo, la reunificación familiar, la violencia, efectos de cambio climático y la inseguridad alimentaria, son algunas de las razones que suscitan la migración.
«El tema migratorio es multicausal, por lo que una persona puede tener más de una razón para migrar», y el abordaje del fenómeno «es complejo», agregó.
PROTEGER A MIGRANTES
Honduras debe impulsar un «enfoque más coherente» de políticas públicas con el ciclo migratorio de los hondureños y su protección en los países de tránsito, y durante la detención y el retorno a su país, indicó la OIM.
«La emigración masiva ha supuesto un nuevo reto para garantizar el respeto a los derechos de las personas migrantes hondureñas en la ruta y en los principales destinos, motivo por el que se requiere que la política migratoria nacional, actualmente en elaboración, facilite el fortalecimiento de los consulados», añadió.
La OIM recomienda a Honduras coordinar con los países de tránsito y destino de sus migrantes la ejecución de programas para asistir su retorno, la extensión de permisos de trabajo y servicios de salud, entre otros.