Tras la crisis sanitaria creada por el COVID-19 durante el 2020, el sector inmobiliario y de construcción en Guatemala estima que para el 2021 la reactivación económica, por medio de la generación de empleo e inversión, tendrá un auge en ciertos municipios del país.
Por Revista Summa
El sector inmobiliario ha sido considerado como uno de los motores para el sostenimiento de la macroeconomía en Guatemala; es por esto que para el 2021 se puede observar un dinamismo fortalecido en el área de construcción de edificios y vivienda que llegará más allá de la ciudad. En 2021 se prevé un incremento en la construcción principalmente en el interior del país, con oferta diferenciada; desde grandes edificios en lugares como Izabal, hasta oferta comercial o de vivienda en áreas de Quetzaltenango.
En este sentido, los expertos comienzan a ver signos de recuperación, mejora y optimismo en las perspectivas para 2021 principalmente en las siguientes áreas:
Inversión en el interior del país: Los grandes desarrolladores han puesto sus ojos en áreas fuera de la metrópoli, en parte por la saturación de oferta en la ciudad. Sin embargo, también existe una cambio en la demanda de viviendas y de uso comercial en estas regiones como Quetzaltenango, Cobán, Etc. “Vemos una gran necesidad de construcción en los departamentos. Por ejemplo en Puerto Barrios, junto a la construcción de Torre Manatí, vemos la necesidad por construcciones de edificios para oficinas, clínicas o de uso médico. Lo cual representa una gran oportunidad tanto para
inversionistas locales como internacionales”, explica Gastón Machado, Gerente de Desarrollos Inmobiliarios Izabal.
Instituciones Financieras: Las instituciones financieras se encuentran mucho más saneadas, empiezan a activar sus carteras y disponibilidad para de créditos para vivienda en sectores del interior del país. También los tipos de interés y los accesos a esas opciones de crédito se están fortaleciendo.
“Debemos tomar en cuenta que la banca en Guatemala siempre ha sido fuerte y se mantiene constante; además la apertura que habrá internacionalmente contribuirá a que la construcción sea una alternativa llamativa para los inversionistas”, continúa Machado.
Rehabilitación de viviendas: El 2020 también deja al país con áreas sumamente afectadas por los huracanes Eta e Iota. Dicha situación puso en evidencia la necesidad de invertir en vivienda de tipo social y contribuir con la reconstrucción de las áreas más afectadas en el interior del país. “La inversión en vivienda social, más que un tema de inversión, debe verse como una necesidad para que tanto sector público y sector privado se puedan unir para llevar acabo la reconstrucción. Así mismo, esto contribuirá con empleos y movimientos económicos en cada una de esas regiones”, indica Machado.