El llamado networking, o “creación de redes de contactos”, impulsa los negocios y atrae oportunidades gracias al intercambio efectivo de información.
Por Revista Summa
¿Alguna vez le ha sucedido que la idea más creativa del día surge justo antes o después de una reunión, mientras hablaba con sus compañeros de trabajo, frente a la máquina de café? Esto no es casualidad, ya que nuestra disposición a imaginar y crear, funciona mejor en ambientes tranquilos donde fluyen libremente las ideas. Por eso, las interacciones sociales pueden convertirse en antenas receptoras de oportunidades que surgen espontáneamente con el networking.
Quienes observan este efecto beneficioso del networking desde un nivel macro son las compañías que ofrecen el servicio de espacios de trabajo colaborativo. Un ejemplo en el país es WeWork, que inició operaciones en Costa Rica en el 2019. Actualmente, la compañía ofrece sus servicios a 26 empresas y tiene poco más de 900 miembros registrados, de los cuales, aproximadamente 400 asisten diariamente a hacer trabajo colaborativo.
De acuerdo con Juan Pablo Bustamante, General Manager de WeWork Costa Rica, la modalidad híbrida de trabajo, es decir, aquella en la que el colaborador puede hacer trabajo en casa pero tiene la alternativa de asistir a una oficina con sus compañeros, es una excelente opción para mantener los beneficios que implica el teletrabajo sin perder la oportunidad de promover encuentros entre personas que pueden robustecer la calidad de los resultados laborales. “Los espacios de trabajo colaborativo justamente están diseñados para promover esas interacciones en las que surge la creatividad y las ideas que mueven los proyectos; esos espacios en los que la colaboración efectiva lleva a la solución de problemas o retos empresariales y principalmente que impulsa la mejora en la productividad”, explicó Bustamante.
Para muchos, la experiencia de aislamiento social generada en el 2020 y parte del 2021, a raíz del Coronavirus, evidenció cómo la ausencia de espacios de intercambio social tuvo un marcado impacto en la productividad y bienestar emocional de los equipos de trabajo. De esta forma, paralelamente al descubrimiento de los beneficios relacionados al trabajo desde la casa, también se revelaban las debilidades asociadas a una separación abrupta del ambiente de intercambio que sucede normalmente dentro de una oficina.
En este sentido, los espacios de trabajo colaborativo suelen ser también ambientes ideales para generar nuevos contactos profesionales y personales que benefician a las organizaciones y a los individuos. No obstante, dada la coyuntura actual marcada por la necesidad de prevenir la dispersión del Coronavirus, dichas interacciones deben producirse en sitios adecuados y seguros en cuanto a sus medidas sanitarias y que certifiquen la inocuidad del entorno.
Ventajas del trabajo colaborativo
¿Por qué elegir un sitio de trabajo colaborativo para desempeñarse profesionalmente? Son conocidas las ventajas del networking, desde encontrar mentores o inversores, hasta afinar habilidades sociales y comunicativas. Sin embargo, en la actualidad, los espacios para realizar este tipo de actividad no abundan, como tampoco el tiempo para entablar procesos interpersonales duraderos; es bajo estas circunstancias donde resulta altamente útil contar con oficinas cuyo hilo integrador sea el trabajo colaborativo, es decir, un entorno no competitivo apto para compartir libremente ideas y propuestas.
De acuerdo con Bustamante, en un espacio flexible de trabajo, la gente socializa, colabora y comparte conocimientos potenciando esa naturaleza humana que busca constantemente las sinergias. “Ciertamente el contacto entre profesionales de distintos ámbitos beneficia a las empresas en la medida en la que se producen nuevas ideas y para esto, WeWork, cuenta con la infraestructura indicada. Esas interacciones suelen generarse durante los períodos de descanso, antes o después de reuniones, en el pasillo o en los puntos de amenidades de toda la oficina. Este tipo de colaboración durante la interacción no planificada estimula la creatividad, lo que conduce a la innovación”, explicó.
Entre las ventajas de un trabajo colaborativo señaladas por Bustamante están la toma rápida de decisiones consensuadas, la resolución conjunta y creativa de retos laborales y la posibilidad de construir lazos sociales estables y fuertes que contribuyen con el bienestar emocional de las personas que componen la empresa.