Presidente Bukele tomó las decisiones acertadas para garantizar la recuperación económica.
Por Revista Summa
La pandemia por COVID-19 continúa desafiando a todas las naciones del mundo: los gobernantes deben proveer los servicios necesarios de salud y contribuir con la recuperación de las actividades productivas.
Por ello, el Presidente Nayib Bukele, con un enfoque de prevención, ha dirigido al país hacia una respuesta ejemplar frente a la pandemia y, de manera simultánea, logró establecer las bases para una recuperación económica inclusiva y con ritmo estable.
El Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2021 de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), indica que la producción interna en El Salvador podría tener una variación de 7.5 % al cierre de 2021, es decir, dos puntos y medio más de lo que se habían calculado antes. La proyección oficial es de cerrar 2021 con una variación positiva de 9 %.
Además, la CEPAL considera que la administración de los recursos del Estado debe acelerar la inversión pública y, en conjunto con la inversión privada, dirigir fondos hacia las actividades que más generan empleo y que ayudan a la sostenibilidad ambiental.
En esa línea, durante la gestión del Presidente Bukele, el Gobierno ha ejecutado con eficiencia una diversidad de obras públicas para mitigar riesgos y favorecer la movilidad. También ha mantenido el apoyo a la industria de las energías renovables y a las actividades agropecuarias.
La misma instancia, que forma parte del Sistema de Naciones Unidas, destaca que se deben fortalecer los ingresos del Estado vía tributos, así como combatir la evasión. Un ejemplo emblemático de este principio es el Plan Antievasión, que ha permitido ya identificar y recuperar $411 millones.
Estos esfuerzos no han afectado la inversión social. Iniciativas como el Plan Control Territorial, la entrega de computadoras a los estudiantes del sistema público, la vacunación, las acciones de atención a Primera Infancia, el Plan Maestro de Rescate Agropecuario y la modernización del sistema hospitalario continúan.
“Y en estas históricas cifras falta incluir el impulso que le dará la Ley Bitcoin a nuestra economía”, expresó el Presidente Bukele, en respaldo a este estudio.
La circulación legal del bitcoin permitirá reducir costos en las operaciones, agilizarlas, promover la inclusión financiera, estimular la inversión extranjera y propiciar la innovación financiera.