El Gobierno, presidido por Joe Biden, calcula que la nueva inyección de fondos permitirá reformar este año 450.000 hogares, donde las familias podrán ahorrar entre el 20 % y el 30 % de sus facturas.
Por EFE
El Gobierno de Estados Unidos anunció este miércoles una inversión adicional de 3.200 millones de dólares destinada a su programa para reformar los hogares del país con el fin de aumentar su eficiencia energética, en medio del alza de precios impulsada por la invasión rusa de Ucrania.
«Los 3.200 millones de dólares que estamos movilizando suponen una inversión 10 veces mayor a lo que gastamos cada año para remodelar hogares. Con eso, vamos a ayudar a las familias a ahorrar dinero con sus facturas», dijo una alta funcionaria de la Administración en una llamada con periodistas.
El programa, vigente desde 1976 y que recibe ahora un nuevo impulso, está destinado a ayudar a las familias a mejorar el aislamiento y la ventilación de sus hogares, instalar sistemas de calefacción y refrigeración de bajo consumo, y adquirir electrodomésticos más eficientes.
El Gobierno, presidido por Joe Biden, calcula que la nueva inyección de fondos permitirá reformar este año 450.000 hogares, donde las familias podrán ahorrar entre el 20 % y el 30 % de sus facturas.
«Para algunas personas pueden parecer cambios pequeños, pero en realidad tienen un impacto muy grande e inmediato ahorrando para las familias cientos de miles de dólares por año», aseguró la misma fuente.
A raíz de la invasión rusa de Ucrania, que ha disparado los precios de la energía alrededor del mundo, Estados Unidos y sus socios europeos se han propuesto aumentar su independencia energética.
La alta funcionaria subrayó que «una de las formas más importantes de aumentar la independencia energética es asegurarse de que está utilizando la energía de manera eficiente».
En ese sentido, reivindicó la necesidad de sustituir los viejos electrodomésticos de los hogares por nuevos aparatos que estén electrificados, así como impulsar la industria de los vehículos eléctricos.
Esta inversión forma parte del gran plan de infraestructuras de 1,2 billones de dólares aprobado por el Congreso el pasado noviembre como uno de los grandes éxitos de la Administración Biden.