Cushman & Wakefield | AB Advisory cree que Costa Rica puede aprovechar su potencial para atraer al 73% de empleados remotos del mundo que quieren que se amplíen las políticas de trabajo a distancia y se cambien para equilibrar la oficina, el hogar y terceros lugares.
Por Revista Summa
Costa Rica estrenó, el pasado mes de julio, el reglamento a la Ley 10.008 o “Ley para Atraer Trabajadores y Prestadores Remotos de Servicios de Carácter Internacional”, conocida como “Ley de Nómadas Digitales”. Con esto, según proyecciones de la firma consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield | AB Advisory, se abrieron las puertas para un robusto mercado. ¿De qué maneras pueden los distintos sectores aprovechar las oportunidades de este impacto potencial?.
Álvaro Cortés, asociado senior de Cushman & Wakefield | AB Advisory prevé que la clave reside en la formación de ecosistemas del lugar de trabajo a lo largo y ancho del país. “Desde nuestro punto de vista, los nómadas representan una enorme oportunidad: una suerte de cápsula de inversión extranjera directa, pero descentralizada en las personas. En lugar de hablar de posibles beneficios para los hoteles, oficinas, viviendas y comercios como sectores aislados, el mercado de los nómadas digitales se verá atraído a Costa Rica en la medida en la que se logren encadenamientos importantes entre cada sector y que conformen, por medio de sus sinergias, un ecosistema”, aseguró.
En 2020, el informe Future of Workplace Experience per Square Foot™ de Cushman & Wakefield, describía cómo la digitalización – que se aceleró con la pandemia – desdibujó las divisiones entre el trabajo, la vida y el ocio, al punto que un 73% de empleados remotos globales querían que se ampliasen las políticas de trabajo a distancia para equilibrar la oficina, el hogar y terceros lugares. Estas estimaciones se materializan en la actualidad y varios países, entre ellos, Costa Rica, articularon medidas para atraer este gran mercado (ver recuadro: ¿Quiénes son los nómadas digitales?). La Cámara Nacional de Turismo, estima que cada persona podría generar a la economía más de $23.000 por semestre si viene a trabajar al país con su familia bajo esta modalidad.
“Los trabajadores remotos buscan variedad de ubicaciones y experiencias en todo el mundo que les brinden comodidad, funcionalidad y bienestar. En este sentido, hemos observado, por un lado, cómo la Ley de Nómadas Digitales ya es parte de la conversación como estrategia de atracción y retención de talento. Las empresas con visión pueden pensar en esta normativa como un beneficio para los trabajadores remotos. Por otra parte, los jugadores pioneros del sector inmobiliario no solo revisan sus modelos de negocio, sino que se preparan con abordajes legales, financieros y tecnológicos flexibles e innovadores para poder satisfacer las demandas particulares del mercado que van a recibir”, agregó Cortés.
Ecosistemas del lugar de trabajo: el rol de cada sector inmobiliario
Las proyecciones de Cushman & Wakefield | AB Advisory apuntan a que el desarrollo de los ecosistemas del lugar de trabajo puede suceder en cualquier zona geográfica de Costa Rica que cuente con la mezcla idónea de atractivos turísticos, acceso a tecnología de punta y comunidades alrededor de intereses de ocio específicos.
“Un factor fundamental para que el sector inmobiliario se articule bajo la modalidad de ecosistema es que se olvide del ‘machote’. El modelo de negocio de cada actor debe proveer contratos flexibles, quizás de corto plazo, de espacios donde se pueda vivir, trabajar y entretenerse. Para esto, apalancarse en la tecnología con plataformas de pago internacionales o soluciones como Airbnb será esencial. Cada propietario debe concebir su espacio como un servicio, bajo una estructura no tradicional. Así, proyectamos que las configuraciones legales y contables se amplíen e impacten otras leyes y reglamentos a futuro; y a favor de la atracción de los nómadas digitales”, afirmó Cortés.
Sector oficinas – Si bien las personas cambiarán para equilibrar la oficina, el hogar y los terceros lugares, la oficina seguirá siendo un motor fundamental de la cultura, el aprendizaje y la vida personal. Resultarán más competitivos los espacios de trabajo plug and play en locaciones interesantes, que cuenten con todas las herramientas: pantallas, mobiliario ergonómico, internet de alta velocidad, entre otros.
Sector hotelero – Para este sector, la estrategia de atracción de nómadas digitales puede representar un componente interesante de recuperación post-pandemia. Los hoteles exitosos serán aquellos con capacidad de captar esta población flotante que no solo piensan en placer y diversión, sino en vivienda de mediano plazo y lugar para trabajar: un híbrido al estilo del hotel corporativo, con amenidades diferenciadas para este mercado.
Sector vivienda – El sector vivienda deberá generar más apertura a las plataformas digitales, asesorarse legalmente para contratos de estadías de mediano plazo y en contabilidad para prepararse para métodos de pago no tradicionales. Por ejemplo, aquellos propietarios que cuenten con un portafolio de inmuebles, pueden proveer distintas opciones de movilidad dentro del país para los nómadas digitales bajo un sistema de membresías, como una alternativa al contrato típico de alquiler de vivienda.
“Como siempre, la recomendación es buscar asesores inmobiliarios, legales y financieros que acompañen con los conocimientos y la visión para actuar ágilmente y adaptarse a la nueva clase de demanda que generarán los nómadas digitales”, concluyó Cortés.