Coopeguanacaste R.L también instaló otros dos cargadores rápidos en las oficinas de la cooperativa eléctrica en Paquera y Nicoya.
Por Revista Summa
La provincia de Guanacaste fortalece su servicio de carga rápida para carros eléctricos. La cooperativa eléctrica Coopeguanacaste R.L inauguró tres puntos nuevos: En el boulevard de Playas del Coco y en sus oficinas ubicadas en Paquera y Nicoya. Para el 2022, colocará otro cargador rápido en la Marina de Flamingo.
Coopeguanacaste R.L continúa creando condiciones para que la movilidad eléctrica sea una realidad que permita avanzar en el tema de la descarbonización de la economía.
La habilitación de estos otros puntos de carga rápida permitirá que quienes vivan o visiten sitios en estos lugares de Guanacaste y posean un vehículo eléctrico, tengan el recurso de forma segura para trasladarse sabiendo que cuentan con la facilidad.
“Para Coopeguanacaste, R.L. el sumarse en este esfuerzo por crear las condiciones para el uso de este tipo de vehículos que utilizan fuentes renovables, muestra el compromiso de cambio hacia la implementación de formas más responsables y sostenibles de movilizarnos y por disminuir nuestra dependencia de los combustibles fósiles” explicó Miguel Gómez, gerente general de Coopeguanacaste, R.L.
Los cargadores rápidos o L3 que instalarán ya cuentan con una tarifa fijada por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) que establece un monto de 150 colones por minuto de carga (precio más IVA).
Cada cargador tendrá instalado un datáfono especial mediante el cual, sin necesidad de afiliarse a plataforma alguna, o contar con alguna aplicación, los usuarios podrán cargar y pagar mediante el uso de sus tarjetas de crédito. El pago en efectivo o transferencia no será posible en las estaciones de Coopeguanacaste, R.L.
“Los cargadores que compramos son de 90 kW y con 3 conectores. Además, el mecanismo de pago que tenemos previsto es básicamente mediante el uso de tarjeta de crédito directamente al datáfono del cargador y sin la necesidad de afiliación alguna a ninguna aplicación.” Explicó Yuri Alvarado, gerente de Distribución de Coopeguanacaste, R.L.
La inversión de los centros de recarga implica una inversión para la Cooperativa de alrededor de $200 000 (128 millones de colones).
Las 4 estaciones de recarga rápida de vehículos eléctricos se unen a los de carga que Coopeguanacaste, R.L instaló en el 2018 en las sucursales de: Nicoya, Huacas de Santa Cruz, Sardinal de Carrillo y oficinas centrales de Coopeguanacaste, R.L. en Santa Cruz.
En Nicoya centro se sustituirá el que se tenía en la sucursal de la Cooperativa por uno nuevo de carga rápida y el que estaba en Nicoya se pasará al Parque Solar Juanilama de Coopeguanacaste, R.L. ubicado en Belén de Carrillo sobre la ruta 21.
Con la aprobación en el 2017 de la Ley Incentivos y promoción para el transporte eléctrico (No. 19 744) se establece un marco legal que, entre otras cosas, posibilitará la importación de vehículos eléctricos con exoneraciones de impuestos que beneficiarán a los usuarios y a quienes apuesten por este tipo de movilidad.
Reducción de impacto de gases de Efecto Invernadero con vehículos eléctricos
Costa Rica es reconocida a nivel internacional por sus esfuerzos en la generación de energía eléctrica a partir de fuentes renovables; sin embargo, en materia de transporte el país tiene una gran deuda dado su alto consumo de hidrocarburos.
La generación eléctrica del país en los últimos años ha sido con fuentes limpias entre un 98,2% y un 99%, pero el consumo de combustibles fósiles se incrementó a causa del crecimiento en la cantidad de vehículos.
El Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) a través del Plan Nacional de Transporte Eléctrico 2018-2030 estima que el sector transporte es responsable del 83% del consumo de hidrocarburos y que genera el 54% de las emisiones de CO2 del país. De ese porcentaje, un 41% proviene de automóviles particulares.
La reducción del impacto en la emisión de gases de efecto invernadero (GEI) con la incorporación de vehículos eléctricos podría llegar a alcanzar las 14,5 millones de toneladas de CO2 para el 2050, según pronósticos del MINAE, de ahí la importancia de apoyar los planes de movilidad eléctrica, construyendo infraestructura, generando facilidades para la adquisición de los vehículos, formando técnicamente a especialistas en estos automóviles y desarrollando las metodologías tarifarias eléctricas y de transporte público.