Tendencia a la baja del tipo de cambio produce escenarios de inestabilidad e incerteza, lo cual es síntoma grave para la economía.
Por Revista Summa
Como un serio golpe a la estabilidad de uno de los motores más importantes de la economía y la generación de empleo y que amerita una mirada mucho más cuidadosa de la autoridad monetaria. Así califica la industria alimentaria la inestabilidad del tipo de cambio de los últimos años, cuya tendencia reciente muestra una preocupante tendencia a la baja.
Juan Ignacio Pérez, presidente de la Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (CACIA), indicó que la industria alimentaria es el tercer sector más importante en el ranking de exportaciones de bienes del país, por lo que la estabilidad financiera de las ventas al exterior es determinante para mantener la economía sana.
“Cuando las ventas al exterior tienen un peso importante en lo que se produce nacionalmente y ese valor se desploma en periodos muy cortos, la estabilidad financiera de las empresas se pone en riesgo y eso se traslada a la economía interna sobre factores como la destrucción o incapacidad de generar nuevos puestos de empleo, incertidumbre para proyectar escenarios de crecimiento o inversión de maquinaria, equipos y tecnologías.
Si a esto le sumamos la realidad de costos de producción creciente en mano de obra y energía, se imposibilita pronosticar una mejora en la capacidad de compra del consumidor nacional”, acotó Pérez.
En este sentido, la industria alimentaria se une al llamado que gran parte del sector productivo hace a la Presidencia Ejecutiva y miembros de la Junta Directiva del Banco Central, para que se tomen las medidas necesarias de manera inmediata, que garanticen la estabilidad en el corto, mediano y largo plazo, lo cual es responsabilidad de la autoridad monetaria.