Los clusters son formas específicas de asociaciones público-privadas en donde se crea un espacio de gobernanza en el cual todos los actores relevantes colaboran para promover la competitividad.
Por Revista Summa
El Secretario Ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), José Manuel Salazar-Xirinachs, propuso la implementación de políticas basadas en clusters como instrumento poderoso para promover el crecimiento y la diversificación productiva, que ayuden a sacar a la región de la prolongada crisis de desarrollo que la caracteriza y que le ha impedido crecer de manera elevada, sostenida y sostenible en las últimas décadas, excepto cuando ha habido bonanzas en los precios de los productos primarios.
El alto funcionario de las Naciones Unidas se encuentra en Davos, Suiza, para participar en la Reunión Anual 2023 del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), que se realiza del 16 al 20 de enero, evento que en su versión número 53⁰ congrega al mayor número de líderes políticos y económicos del mundo en su historia, incluyendo más de 50 jefes de Estado o de gobierno, 56 ministros de finanzas, 19 presidentes de bancos centrales, 30 ministros de comercio y 35 ministros(as) de relaciones exteriores, bajo el lema “Cooperación en un mundo fagmentado” (Cooperation in a Fragmented World).
Al exponer en la sesión “Soluciones sostenibles para América Latina” -realizada el miércoles 18 de enero y a la cual asistieron el Presidente Ecuador, la Vicepresidenta de República Dominicana, y destacadas autoridades del sector público, empresarios y académicos- el Secretario Ejecutivo de la CEPAL recalcó que la productividad no ha crecido nada en 30 años en América Latina y el Caribe, que es la región del mundo con el peor desempeño de productividad en los últimos 40 años. Añadió que la tasa promedio de crecimiento de los últimos diez años (desde 2014 a 2023 inclusive, considerando la proyección de 1,3% de crecimiento para el presente año) es de solo 0,9%, esto es, menos de la mitad del crecimiento que la región tuvo en la famosa “década perdida” de los 1980s.
“Por tanto, esta década será más perdida que aquella ‘década perdida’. Esta es la verdadera crisis de desarrollo que enfrenta América Latina y el Caribe: la región ha fracasado estrepitosamente a la hora de promover la sofisticación tecnológica, la complejidad económica y la diversificación de la producción y las exportaciones, lo que ha hecho que todos los países caigan en la trampa del ingreso medio”, declaró. Como resultado ninguno se ha acercado siquiera al umbral de los $20.000 dólares de ingreso per capita.
En este contexto, Salazar-Xirinachs advirtió que sin crecimiento de la productividad, la prosperidad no es sostenible, la creación de empleos y las políticas sociales no son sostenibles, la movilidad social no es posible, y sin todo esto la reducción de desigualdad, y los pactos sociales están en riesgo.
“Sabemos que no hay recetas fáciles para lograr un crecimiento elevado, sostenido y sostenible. No hay balas de plata. Hay toda una lista de cosas que tienen que estar bien: clima de inversión, infraestructuras, educación, equilibrios macroeconómicos, buena gobernanza. Pero una solución podrían ser las políticas de iniciativas de clusters o las políticas basadas en clusters, que pueden construirse desde abajo, aunque algunos de los factores en la lista de competitividad no estén correctos al 100%”, explicó.
Indicó que los clusters son formas específicas de asociaciones público-privadas en donde se crea un espacio de gobernanza en el cual todos los actores relevantes colaboran para promover la competitividad, la creación de empleos, innovación, habilidades, financiamiento y la remoción de obstáculos para el crecimiento del cluster, sector o aglomeración. Los clusters más exitosos son aquellos liderados por el sector privado, con una estrecha cooperación de agencias de gobierno e instituciones educacionales y de formación profesional.
“Los países de América Latina y el Caribe deben adoptar enfoques basados en clusters y escalarlos en sus políticas de desarrollo productivo. En este sentido, queremos convertir a la CEPAL en un Centro de Excelencia en Conocimiento sobre políticas de clusters, entre otros temas”, precisó el Secretario Ejecutivo del Organismo.
Por su parte, en la sesión del WEF “Permitir una transición equitativa” -efectuada este jueves 19 de enero- José Manuel Salazar-Xirinachs fue uno de los oradores principales, junto a destacados panelistas quienes abordaron los caminos para incorporar la igualdad y la justicia en la transición hacia economías más verdes, equitativas e inclusivas.
En la ocasión enfatizó la necesidad de acelerar el ritmo de las transformaciones económicas en la región diciendo que los cambios económicos, ya sea inducidos por el comercio y la globalización, por la revolución tecnológica, o por el crecimiento verde y el gran impulso ambiental, son un proceso de “destrucción creativa” o cambio estructural donde hay sectores, trabajadores y territorios que ganan, y otros que pierden. Y señaló que el gran reto de la política pública para promover una transición justa y equitativa es hacer que los aspectos creativos del cambio vayan delante de los aspectos destructivos en términos de desempleo y la obsolescencia de las capacidades productivas existentes.
Agregó que para tener una transición equitativa y justa uno de los aspectos fundamentales es hacer una gran inversión en educación y capacitación. “Una de las mayores restricciones para hacer la transición hacia lo nuevo es no tener el talento y las competencias que demandan los nuevos sectores de futuro”, señaló. Además, recomendó fortalecer las llamadas políticas activas de mercado de trabajo para ayudar a los trabajadores desplazados a conseguir nuevas oportunidades de empleo, vía entrenamiento, reentrenamiento y políticas de reinserción laboral.
Por otra parte, en una columna publicada de manera especial en el blog de la Reunión Anual 2023 del Foro Económico Mundial, el Secretario Ejecutivo de la CEPAL abordó cómo revertir el ciclo de lento crecimiento que sufre América Latina y el Caribe. En el texto, Salazar-Xirinachs señala que el crecimiento medio de los países de la región será del 1,3% en 2023, reflejando una trampa estructural de bajo crecimiento, elevada desigualdad, instituciones débiles y mala gobernanza, combinada con unas condiciones internacionales adversas. Por ello “las prioridades de política deben centrarse en reactivar los mercados de trabajo, limitar las subidas del coste de la vida, mejorar la recaudación de impuestos y proteger a los grupos vulnerables, e invertir en políticas sociales bien diseñadas y en sanidad universal”, indica en la publicación.