Estos nuevos compromisos se basan en los esfuerzos de toda la compañía para mitigar el cambio climático y prepararse mejor para enfrentar los desastres naturales.
Por Revista Summa
AT&T se ha comprometido a ser carbono neutral en todas sus operaciones globales para 2035. La compañía también está ampliando su Herramienta de Análisis de Cambio Climático (Climate Change Analysis Tool – CCAT) en los Estados Unidos para identificar los posibles impactos del cambio climático en la red y las operaciones, hasta 30 años a futuro.
La compañía logrará cero emisiones netas de carbono para sus alcances 1 y 2[i], el equivalente anual al consumo de electricidad de 1 104 036 hogares[ii], centrándose en seis iniciativas clave:
- Virtualización de muchas funciones de la red: AT&T eliminará porciones significativas de equipos de red con alto consumo de energía y a cambio dependerá de hardware de bajo costo y eficiente en el consumo de energía, que pueda virtualizar las funciones del equipo de red. Como resultado, la compañía podrá implementar nuevas funciones más rápido, utilizar menos energía y reducir su huella de gases de efecto invernadero. Actualmente, la compañía ha virtualizado el 75% de sus funciones principales de red.
- Transición a una flota de bajas emisiones: AT&T continuará reduciendo las emisiones de su flota operativa mediante la optimización de las rutas, el cambio a vehículos híbridos y la reducción del tamaño total de la flota. La compañía también está planificando la descarbonización de su flota.
- Aceleración de la eficiencia energética y los esfuerzos de optimización de la red: cada año, AT&T implementa miles de proyectos de eficiencia energética en toda su red y operaciones, reduciendo el uso de electricidad y los costos.
- Ampliación de la producción sustentable de películas y programas de televisión: WarnerMedia reduce el consumo de energía y recursos asociados a la producción de películas y programas de televisión mediante soluciones de tecnología limpia, productos sustentables y esfuerzos de reutilización y reducción de desechos.
- Respaldo al mercado de la energía renovable: al celebrar acuerdos de compra de energía con desarrolladores de energía renovable, AT&T reduce su huella de emisiones, se protege contra el aumento de los costos de energía y ayuda a incorporar más electricidad limpia a la red eléctrica de los EE. UU.
- Inversión en compensaciones de carbono: aunque el objetivo de AT&T es reducir su huella a un nivel de emisiones lo más cercano posible a cero, puede que haya algunas fuentes de emisiones que no se puedan eliminar. En estos casos, la compañía invertirá en compensaciones de carbono para cubrir las emisiones asociadas.
Ampliación de la herramienta de análisis de cambio climático, líder en la industria, a fin de prepararse mejor para los desastres naturales
Si bien se esfuerza por la neutralidad en emisiones de carbono, AT&T sabe que también necesita continuar su camino de adaptación y resiliencia. La compañía también está ampliando su Herramienta de Análisis de Cambio Climático (CCAT por sus siglas en inglés), líder en la industria, de cuatro estados piloto en el sudeste de los Estados Unidos para el resto del país, para identificar los posibles impactos del cambio climático en su red y operaciones, hasta 30 años a futuro. Los impactos climáticos incluirán inundaciones y huracanes, así como proyecciones de sequías e incendios forestales en todo EE. UU.
Durante los últimos 5 años (2015 a 2019), AT&T invirtió más de 135 mil millones de dólares en sus redes inalámbricas y cableadas, incluidas las inversiones de capital y la adquisición de espectro inalámbrico y operaciones. Durante este mismo período, AT&T invirtió más en los Estados Unidos que cualquier otra compañía pública. AT&T ha invertido alrededor de mil millones de dólares en la recuperación de daños causados por acontecimientos climáticos severos desde 2016. Con la ampliación e implementación de la herramienta CCAT, AT&T puede garantizar mejor la resiliencia de su infraestructura.
“El cambio climático y los desastres naturales ponen a prueba nuestra red cada año”, dijo John Stankey, CEO de AT&T. “Reconocemos el impacto a largo plazo que estos compromisos pueden tener, y se lo debemos a los millones de clientes que confían en nuestros servicios para crear el negocio más resiliente y sustentable que podamos”.
En 2019 se puso en marcha un proyecto piloto de la herramienta CCAT, respaldado por las proyecciones de cambio climático del Laboratorio Nacional Argonne del Departamento de Energía de los Estados Unidos, que se centró en los impactos climáticos regionales en el sudeste, como los huracanes y las inundaciones. Por ejemplo, AT&T puede hacer referencias cruzadas de las ubicaciones de sus cables de fibra óptica con un aumento proyectado del nivel del mar para el año 2050 para comprender dónde fortalecer su infraestructura existente y planificar mejor las construcciones futuras con la resiliencia como prioridad.
El año pasado, la compañía lanzó el Desafío Comunitario de Resiliencia Climática de AT&T para que las universidades colaboren con los gobiernos locales en el sudeste para llevar a cabo análisis de riesgo climático utilizando los datos desarrollados por el Laboratorio Nacional Argonne y compartidos por AT&T. AT&T proporcionó 250 mil dólares para evaluar los riesgos climáticos y ayudar a incrementar la resiliencia de la comunidad en 5 áreas geográficas. Las universidades e instituciones beneficiadas fueron Appalachian State University (Boone, NC), Georgia Institute of Technology (Atlanta, GA), University of Georgia (Athens, GA), University of Miami (Miami, FL) y University of South Florida (St. Petersburg, FL).
Al igual que con el proyecto piloto, AT&T hará que los datos de modelado climático calculados por el Laboratorio Nacional Argonne para AT&T estén disponibles para el público, incluidas universidades, municipios y otras entidades, para que los utilicen en sus propios análisis de riesgo climático.