Las escuelas públicas de El Salvador implementan desde el miércoles un estricto control que incluye revisar que los estudiantes vistan un uniforme limpio, cabello adecuado y brinden un saludo respetuoso, como medida de “orden y disciplina” impulsada por la ministra Trigueros.
Por EFE.
El Sindicato de Maestras y Maestros de la Educación Pública de El Salvador (Simeduco) espera los primeros 100 días de trabajo de la recién nombrada ministra de Educación, la capitana y doctora Karla Trigueros, para evaluar su desempeño, dijo este jueves en una declaración a EFE el secretario general del gremio, Francisco Zelada.
El nombramiento de Trigueros, que ingresó como cadete en la Escuela Militar Capitán General Gerardo Barrios en enero de 2007 y posteriormente obtuvo una beca para estudiar Medicina en la Universidad Salvadoreña Alberto Masferrer, ha dividido opiniones en el país, con posiciones a favor y en contra.
“Hemos analizado el nombramiento de la ministra de Educación y, por el momento, no hemos encontrado en su perfil la experiencia relacionada con el área educativa”, indicó Zelada.
Sin embargo, comentó, “no podemos descalificar una gestión que recién comienza, porque sabemos que un funcionario, como la ministra de Educación, si se hace acompañar de un buen equipo de asesores, expertos en el tema educativo, su gestión podría ser exitosa”.
“Estamos esperando que la gestión de la actual ministra dé frutos y hemos acordado hacer una evaluación más detenida después de los primeros 100 días de gestión”, puntualizó.
El profesor explicó que desde Simeduco “siempre hemos soñado con que el Ministerio de Educación sea dirigido por un pedagogo, un perfil humanista”.
Lineamiento “nada novedoso”
Las escuelas públicas de El Salvador implementan desde el miércoles un estricto control que incluye revisar que los estudiantes vistan un uniforme limpio, cabello adecuado y brinden un saludo respetuoso, como medida de “orden y disciplina” impulsada por la ministra Trigueros.
Para el secretario general de Simeduco, esta disposición “no es novedosa”, ya que las escuelas públicas salvadoreñas cuentan con un reglamento interno donde estos, y otros lineamientos, están establecidos.
Explicó que “cada centro educativo ejecuta esta medida de revisión y la tiene establecida en su reglamento interno”, por lo que “esta disposición trata de injerir y forzar a aquellas escuelas que a lo mejor no lo tienen incorporado en su reglamento”.
Zelada dijo que los reglamentos internos de las escuelas establecen también, entre otras cosas, la prohibición del ingreso de drogas, objetos no permitidos, no permite el maquillaje en niñas y adolescentes, ni el cabello teñido.
De acuerdo con el líder de Simeduco, “lo nuevo” en las disposiciones de Trigueros es “la acción contra directores por no cumplir lo indicado”.
Uniforme limpio y ordenado, corte de cabello adecuado, presentación correcta y saludo respetuoso, son las disposiciones que los alumnos deben cumplir y que los directores y maestros de las escuelas deben supervisar.
De no hacerlo, de acuerdo con un memorándum enviado por Trigueros, “será considerada una falta grave de responsabilidad administrativa” y se “dará lugar a las acciones correspondientes”.
“Ese lineamento queda corto, no es nada novedoso en virtud que la mayoría de centros escolares ejecutan la medida (…) lo nuevo es la falta grave que no está contemplada en el Reglamento de la Ley de la Carrera Docente”, añadió.