Panamá es uno de los tres países del mundo que es carbono negativo. Además, desde 2023 protege el 54% de sus aguas marinas.
Por EFE
El Ministerio de Ambiente de Panamá alerta el «preocupante» aumento de la deforestación y degradación en el país centroamericano y ve como una «necesidad urgente» la implementación de políticas de protección ambiental, a raíz de la divulgación de un estudio en el marco del mecanismo de Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación (REDD+).
«Se ha identificado una preocupante tendencia al aumento de la deforestación y la degradación, lo que resalta la necesidad urgente de reforzar las acciones de protección y restauración de los ecosistemas del país», advirtió el ministerio en un comunicado.
Por ello, añadió, «es fundamental redoblar esfuerzos y fortalecer las políticas de conservación para garantizar la sostenibilidad de los recursos forestales y la resiliencia climática de Panamá».
El estudio Nivel de Referencia Forestal (NRF) 2025, el «más exhaustivo» realizado hasta la fecha acerca de la degradación y deforestación, muestra, a pesar de los retos, la situación privilegiada de Panamá, que registra emisiones negativas de dióxido de carbono, debido a que todavía son mayores las absorciones de CO2 que las emisiones de gases de efecto invernadero que produce.
«Es negativo debido a la significativa contribución de los bosques maduros, secundarios, manglares y plantaciones forestales del país», indica el informe.
El objetivo de este estudio, detalla el documento, es proporcionar una base sólida para la implementación efectiva de actividades REDD+, con un enfoque específico en la reducción de emisiones, el incremento de absorciones y la generación de resultados verificables.
«(El reto es) parar la deforestación y la destrucción (…) Este Mapatón (el estudio) nos da una línea base para poder sumar recursos financieros a través de la captura de carbono y fijar carbono para poder garantizar para siempre nuestros recursos naturales y su supervivencia», dijo a EFE en la víspera el ministro de Ambiente de Panamá, Juan Carlos Navarro.
Navarro, también ambientalista, admitió que entre las causas de la forestación está «muchas veces el desarrollo desordenado» o que se deforestan áreas para convertirlas en potreros o terrenos dedicados a pastos para alimentar y guardar el ganado, al tiempo que «se destruyen recursos naturales innecesariamente».