La IA se está utilizando cada vez más en la predicción del delito.
Por Revista Summa
La seguridad urbana es una preocupación constante en las ciudades de todo el mundo. El aumento de la urbanización y la complejidad de los entornos urbanos han desafiado tradicionales métodos de vigilancia y prevención del delito. Sin embargo, en la era digital, la inteligencia artificial (IA) ha surgido como una herramienta poderosa para abordar este desafío.
La IA ofrece capacidades de análisis y procesamiento de datos que permiten a las autoridades detectar patrones delictivos, predecir áreas de alto riesgo y responder de manera más eficiente a incidentes en tiempo real. Una de las aplicaciones más destacadas de la IA en la seguridad urbana es la videovigilancia inteligente.
Los sistemas de videovigilancia inteligente, impulsados por algoritmos de IA, pueden monitorear grandes volúmenes de datos de video en tiempo real y detectar automáticamente comportamientos sospechosos, como merodeo, vandalismo o robo.
Estos sistemas pueden analizar el movimiento de personas y vehículos, identificar objetos abandonados o no autorizados, y alertar a las autoridades sobre posibles amenazas.
Un ejemplo destacado de este enfoque es el proyecto «Barrio Protegido», impulsado por SONDA y la Startup VSaaS, el cual ha emergido como un ejemplo pionero de cómo la inteligencia artificial puede transformar la seguridad urbana. A través de la utilización de cámaras de videovigilancia equipadas con IA han logrado prevenir robos, hurtos y otros delitos. Estos sistemas han demostrado ser altamente efectivos en la reducción de la delincuencia y en el aumento de la sensación de seguridad entre los ciudadanos.
Este innovador sistema de videovigilancia inteligente, implementado en la comuna de Las Condes en Santiago de Chile, ha marcado un hito significativo en la reducción de robos domiciliarios, hurtos en locales comerciales y la mejora general de la seguridad en las calles. A través de la integración de tecnología avanzada y análisis de datos en tiempo real, Barrio Protegido no solo ha fortalecido la capacidad de vigilancia, sino que también ha generado un impacto tangible en la calidad de vida de los vecinos.
Uno de los aspectos destacados de este proyecto es su capacidad para detectar una amplia gama de eventos y comportamientos sospechosos en tiempo real. Desde la detección de intrusos hasta la lectura de placas patentes, el sistema proporciona a las autoridades una visión integral de la actividad delictiva potencial, permitiendo respuestas más rápidas y efectivas. Este proyecto ejemplifica la visión de SONDA de crear entornos urbanos seguros y eficientes mediante soluciones tecnológicas innovadoras.
Además de la videovigilancia, la IA se está utilizando cada vez más en la predicción del delito. Los algoritmos pueden analizar datos históricos de delitos, como ubicación, hora y tipo de delito, para identificar patrones y tendencias. Esto permite a las fuerzas del orden anticiparse a los delitos y asignar recursos de manera más estratégica.
Otro aspecto importante es la capacidad de la IA para analizar grandes cantidades de datos de múltiples fuentes, como redes sociales, sensores IoT y sistemas de información geográfica. Al integrar esta información, las autoridades pueden obtener una visión más completa de la situación y tomar decisiones más informadas.
En un entorno tan cambiante y dinámico la inteligencia artificial ofrece un potencial significativo para mejorar la seguridad urbana y reducir la incidencia de delitos en las ciudades. Al aprovechar las capacidades de análisis y predicción de la IA, las autoridades pueden fortalecer la prevención del delito y crear entornos urbanos más seguros y resilientes para todos sus ciudadanos.