Estos locales han tenido que paliar con los problemas de suministros, gastos y poco compradores por los cierres de calles.
Por La Estrella
A los centros comerciales, los cierres de calles que se han mantenido en las últimas semanas les han producido una caída del 70% en ventas no efectuadas y una pérdida acumulada entre $7 millones u $8 millones.
Erick Samora, presidente de la Asociación Panameña de Centros Comerciales (Apacecom), reconoció que para bien o mal los mall se encuentran ubicados en las arterias principales del país, es decir, en las vías que constantemente tienen cierres, lo que genera temor en las personas de transitar libremente.
Explicó que durante los primeros días de las manifestaciones tuvieron una caída del 80% en las ventas y las jornadas laborales fueron reducidas de 10:00 de la mañana a 5:00 de la tarde o de 11:00 de la mañana hasta las 6:00 de la tarde.
Por ejemplo, dijo que el fin de semana pasado “fue un poco más alentador”, ya que las personas salieron a hacer sus compras porque había más facilidades de tránsito. Sin embargo, aclaró que esas compras “no fueron las que se esperaban”.
“Hay una realidad paralela que es la capacidad económica de las personas. Sabemos que hay muchas personas que dependen del día a día, por lo que los cierres de vía los está afectando”, señaló.
El presidente de Apacecom recordó que el escenario se complica porque al final la cadena de gasto se mantiene, como la nómina, la planilla y los compromisos públicos, que “complica mucho pagarlos porque evidentemente hay una crisis”.
Comentó que el principal problema por el que están atravesando los centros comerciales tiene que ver con la logística, suministro y surtido, porque los camiones quedan varados en los cierres, especialmente los del interior del país.
Aún así, dijo, han experimentado que algunos de los distribuidores sí han logrado hacer las entregas, pero en horarios entre 5:00 o 6:00 de la mañana, con el fin de poder transitar de alguna manera y poder suplir a la mayor cantidad de sucursales.
Cree que para la última temporada del año las tiendas no se verán afectadas, porque mucho del producto relacionado a las festividades navideñas ya estaba en el país.
La otra crisis, según Samora, tiene que ver con las 15.000 plazas laborales que no van a ser contratadas para la temporada de fin de año, como ya es costumbre. “A mediados de noviembre siempre se daba la contratación de personal de refuerzo operativo en las tiendas, pero ahora muchas no van a poder hacerle frente porque vienen arrastrando pérdidas desde el último mes”, informó.
Por ejemplo, detalló que con los actos de vandalismo los centros comerciales tuvieron que reforzar la seguridad, un gasto que no estaba previsto en sus presupuestos, pero evidentemente impactan en su operación.
Samora agregó que otra realidad es la no contratación de microempresarios que ofrecían eventos y actividades dentro de las instalaciones para entretener a los compradores, como era la de bandas musicales para conmemorar la llegada del mes de la patria.
Conforme avanza la semana, el presidente de Apacecom espera que “se reabran las vías para que todos puedan abastecerse y regresar a los niveles de comercialización de antes”.