Alta demanda de dispositivos médicos y electrónicos en zonas francas del país, marca una fuerte tendencia hacia el consumo de nitrógeno.
Por Revista Summa
La industria de los gases se ha convertido en uno de los principales promotores del crecimiento y la salud del país, al asegurar la capacidad de suplir el nitrógeno, elemento vital para la producción del sector más dinámico de la economía costarricense, reflejado en la Zona Franca Coyol, que genera más de 16.000 empleos directos.
¿Cómo lo hacen? “Las grandes empresas que producen una diversa gama de dispositivos médicos y otras, instaladas en Costa Rica, utilizan nitrógeno en los sistemas de atmósfera controlada o atmósfera modificada, para desplazar el oxígeno del empaque y evitar que el producto se oxide o contamine. Este elemento es vital en los productos de tipo neuro endovascular, implantes mamarios, cardiovasculares, endoscópicos, ortopédicos y válvulas cardiacas, entre otros, que necesitan ser esterilizadas”, explicó Minor Calvo, Gerente General de Productos del Aire de Costa Rica.
El comportamiento en la demanda de nitrógeno que viene en aumento desde hace 7 años, es exclusiva para Costa Rica en la región. “Este fenómeno se debe a las condiciones de estabilidad política, calidad de la mano de obra, ubicación geográfica estratégica, que se han constituido en un gran imán para la atracción de las empresas de la industria médica. Productos del Aire es la única compañía regional con una capacidad de producción de gases médicos e industriales de 700 toneladas diarias, lo que demuestra la capacidad para suplir a esta industria”, recalcó Calvo.
Salva vidas, madura bananos, crea burbujas y construye portones
Aunque no los podamos ver en su estado natural, los gases están presentes en prácticamente todas las actividades y cumplen funciones clave para salvar la vida de las personas y facilitar las distintas actividades de la vida cotidiana en los hogares y contribuir a la producción de las empresas.
La pandemia del Covid-19 visibilizó la importancia del oxígeno médico para salvar millones de vidas y puso a prueba la capacidad, eficacia y eficiencia de la industria de los productos del aire.
“En otras industrias ayudan a la maduración del banano y la piña, preservan de una manera más natural otros productos como el queso, y están presentes en herramientas de construcción como la soldadura, este último, uno de los productos de mayor crecimiento de ventas en el país”, subrayó el Gerente General de Productos del Aire de Costa Rica, Minor Calvo.
Pero también los gases y en particular el dióxido de carbono, generan el sabor y la inigualable sensación de las burbujas en las bebidas carbonatadas. Además, es usado como extintor de fuego y estimulante del crecimiento en invernaderos controlados. Para este tipo de producto la empresa dispone de una planta de producción en las faldas del volcán Poás, en Alajuela.
Calvo repasa los puntos determinantes del constante crecimiento de Productos del Aire. “Superar con éxito el suministro vital del oxígeno médico en la pandemia y estar preparados ante cualquier eventualidad, se debe a la estratégica capacidad instalada, a la movilización del producto en la región y al novedoso sistema para el monitoreo remoto de todos los tanques de almacenamiento (telemetría), que permite visualizar en tiempo real la cantidad de consumo diario, nivel de producto, fecha de carga y de vacío”.
Para el alto ejecutivo de la empresa, el posicionamiento y crecimiento en el mercado costarricense exige a Productos del Aire invertir en nuevos tanques de almacenamiento, unidades de transporte especializadas, la más novedosa tecnología, en los más altos estándares de seguridad y en la capacitación de todo el personal. “Siguiendo con la estrategia de negocio del conglomerado regional, recientemente, comenzó a operar una planta en Panamá, como parte de la planificación a 5 años plazo, para atender la demanda regional”.
Seguridad certificada
Productos del Aire se toma en serio la seguridad de todo el personal, clientes y el entorno de los usuarios finales, y para ello cuenta con rigurosas certificaciones como la del Departamento de Transportes de Estados Unidos (DOT, por sus siglas en inglés), que minimiza el riesgo de explosiones relacionadas a cilindros.
La Jefa de Planta y Operaciones de la compañía, Laura Borbón, resaltó que además cuentan con la certificación ISO 4500, ISO 9001:2015, FCSS 22000. “Contamos con un Sistema Integral de Gestión que va más allá de cumplir con todos las exigencias de las certificaciones nacionales e internacionales. Conocemos e identificamos los riesgos relacionados a esta industria, pero sobre todo, que detrás de cada proceso y entrega de los productos, hay personas. Es por todos ellos y sus familias, que todos los días trabajamos para un entorno más seguro”, resaltó Borbón.