Desde el pasado 13 de marzo se encuentran suspendidos el cobro del Fondo de Estabilización y Fomento Económico (FEFE).
Por Revista Summa
El Gobierno del Presidente Nayib Bukele sigue ejecutando las acciones necesarias para cuidar la economía de las familias salvadoreñas, ante los efectos de la crisis mundial. Por ello, ha ampliado la vigencia de las medidas para que los beneficios de las iniciativas que contienen el impacto de esa situación externa se mantengan.
Desde el pasado 13 de marzo se encuentran suspendidos el cobro del Fondo de Estabilización y Fomento Económico (FEFE) y el de Contribución al Transportes (COTRANS). Esas dos medidas fueron ampliadas, ayer, por la Asamblea Legislativa, a solicitud del Gobierno.
Además, también se acordó mantener la Ley Especial Transitoria para Fijar Precios Máximos de los Combustibles, la cual permite que el costo de los hidrocarburos esté estable y que el aumento no sea percibido por la población, ya que es el Gobierno del Presidente Bukele el que absorbe dicho incremento.
“Es sumamente esperanzador que nuestro país se mantenga como uno de los tres países con la menor inflación en América Latina”, declaró el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, sobre los resultados exitosos del plan anticrisis del Gobierno.
Las medidas fueron ampliadas por 50 días más, estarán vigentes desde el 1 de septiembre hasta el 20 de octubre próximo. El ministro Zelaya añadió que estas medidas son importantes para continuar enfrentando esta crisis internacional y consideró que es difícil que alguien se oponga o critique dichas iniciativas, por los beneficios que traslada a la población.
“Con estos subsidios se contiene el incremento de precios y evita un incremento cascada en la economía”, sostuvo Zelaya, y detalló que el Gobierno destina $60 millones por mes para poder subsidiar el incremento de los combustibles, algo para lo que la caja fiscal tiene capacidad.
El funcionario dijo que el éxito de estas medidas que velan por el bienestar de la población se muestra en los altos niveles de popularidad del jefe de Estado, ya que ha tomado las medidas acertadas y oportunas, incluso en medio de las crisis más difíciles sanitarias y de la economía global.