Para visibilizar este novedoso proyecto amigable con el medio ambiente en la región, una caravana, compuesta exclusivamente por coches eléctricos, recorrió la semana pasada casi 900 kilómetros.
Por EFE
Unos 850 kilómetros «sostenibles» son los que se pueden recorrer con un automóvil eléctrico entre Ciudad de Panamá y San José, Costa Rica, por la emblemática carretera Panamericana, después de que ambos países creasen una «ruta eléctrica» como una apuesta fiel al medio ambiente.
«Además de reducir emisiones, buscamos unificar los esfuerzos entre ambos países, de manera que Gobierno y sector privado puedan hacer acciones en pro de que la ciudadanía adopte vehículos eléctricos», dijo a Efe el consultor nacional de movilidad eléctrica de la Secretaría de Energía de Panamá, Alexander Fragueiro.
Solo en Panamá, hay 60 puntos de recarga, mientras que Costa Rica cuenta con 43 de carga rápida -que demoran alrededor de una hora- y 150 «semi rápidos» -con un tiempo estimado de ocho horas, según el tipo de coche y batería-.
Pero la mayoría están distribuidos estratégicamente en comercios a orillas de la Panamericana, el sistema de carretas que conecta América de norte a sur -el único punto donde corta es el Tapón de Darién, la selvática frontera entre Panamá y Colombia-.
«Hay puntos de recarga en la Casa de las Baterías, que están a lo largo de la Panamericana por lo que no tienes que desviarte, así como otros restaurantes con cargadores lentos y rápidos», explicó Fragueiro.
Para visibilizar este novedoso proyecto amigable con el medio ambiente en la región, una caravana, compuesta exclusivamente por coches eléctricos, recorrió la semana pasada casi 900 kilómetros desde la capital costarricense hasta Ciudad de Panamá.
«Estamos muy contentos y entusiasmados. La ruta eléctrica San José – Panamá tiene varios puntos de cargas para que los que tenemos vehículo eléctricos nos podamos movilizar de capital a capital», comentó a Efe la directora ejecutiva de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica, Silvia Rojas.
UN SISTEMA ELÉCTRICO RENOVABLE: RECARGAR CON ENERGÍA EÓLICA Y SOLAR
El sector privado es uno de los brazos que más apuesta al proyecto, colocando los puntos de recarga en sus establecimientos, que se sostienen con energías renovables.
«Vemos como cada vez más el sector privado se va entusiasmado y también está apostando por la movilidad eléctrica. Llegamos a Panamá demostrando que sí es posible», añadió Rojas.
La directora ejecutiva detalló que «la tecnología del vehículo es cero emisiones, pero también importa la electricidad con lo que lo alimentas».
Por eso, «esta ruta eléctrica del lado de Costa Rica el 99% de la energía es renovable y del lado panameño también se están produciendo con energía eólica y solar», lo que cierra «el ciclo de cero emisiones».
Una de las empresas que ofrece puntos eléctricos con energía limpia en Panamá es La Casa de las Baterías, empresa que tiene distribuidas sucursales a lo largo de la carretera con paneles solares.
«El 100 % de la energía que entregamos es renovable. Además de apostar por la movilidad eléctrica, apostamos por la energía sostenible», declaró a Efe el gerente de energía de La Casa de las Baterías, Manuel Giménez.
AMIGABLE CON EL MEDIO AMBIENTE Y ECONÓMICO
Evergo, otra de las empresas que se sumaron a esta iniciativa, también ofrece puntos con energía renovable «muy sencillos y se pueden manejar desde una Evergon app», según explicó uno de sus voceros, Norberto Cussati.
«Es una billetera virtual donde puede ser las estaciones de carga que hay en todo el país, reservar, quienes las están usando, hacer los pagos, aunque ahora están de forma gratuita», señaló Cussati.
Tanto Evergo como La Casa de las Baterías dan gratuitamente la energía en sus diferentes puestos, aunque, según explicó Fragueiro, la opción del coche eléctrico es mucho más económica que un vehículo de combustibles fósiles.
«Desde Costa Rica hasta Panamá puede costar unos 8 dólares, en comparación con un vehículo de combustión que puede ser más de 25 o 50 dólares», añadió.
Convirtiéndolo en «una apuesta económica mucho más favorable y vale la pena resaltar que los eléctricos cuando bajan las lomas usan el frenado regenerativo».