En el comercio electrónico existen todavía sectores en los que la injerencia de la mujer es muy reducida.
Por Sofia Zugarramurdi, Business Development PayPal Latin America
Las empresas con mujeres en posiciones de liderazgo tienen mejores resultados, incluida la rentabilidad. Esta es la conclusión de un informe llamado Women in Business and Management: The Business Case for Change,[1] publicado el año pasado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), un órgano de las Naciones Unidas. Según la investigación, cuanto mayor sea el número de mujeres, especialmente en posiciones de liderazgo, mejores serán los resultados de una organización. Además, el 57% de los encuestados dijo que percibe mejoras en la reputación, es decir, en la imagen pública de la empresa.
Con esta referencia, la intención es abrir una conversación que es necesaria y provechosa para estos momentos ¿Cuál es la clave del liderazgo desde una perspectiva femenina?
En el comercio electrónico existen todavía sectores en los que la injerencia de la mujer es muy reducida. El de tecnología es sin duda uno de ellos; por eso, quisiera compartir tres puntos sobre liderazgo que considero muy importantes en la industria.
El ambiente colaborativo es esencial en el mercado, en los negocios es vital poder contar con un networking que te permita conocer a aliados clave para poder crecer y avanzar hacia los mismos objetivos. Esta práctica facilita la negociación y participación asertiva. Establecer equipos que puedan relacionarse con otros de la industria es básico. PayPal es un ejemplo de esto, en la apertura que tiene hacia la co-relación de jugadores para abrir y crecer el mercado.
Otro elemento clave en el liderazgo de equipos es, la desmitificación de los roles sociales. En la sociedad debe cambiar la conciencia de la mujer misma, la conciencia de que puede ser lo que quiera, elegir su propio camino, ser feliz consigo misma. Éste es quizá el mayor desafío, porque estamos lidiando con la autoestima y el empoderamiento femenino. Dar poder a las mujeres para tomar decisiones y verlas como un todo, como un ser en plenitud y no solo en una de sus facetas. Y éste es tal vez un elemento que pueda ser diferente, tener esa conciencia permite equilibrar nuestros equipos de una manera más equitativa.
Finalmente, quiero hablar de la resiliencia. Históricamente se ha visto que en medio de la adversidad, las mujeres se empoderan. No sólo se adaptan sino que también crecen[2]. En general, como aspecto clave del liderazgo, el tener la capacidad de enfrentar los retos y tomar los obstáculos como oportunidades garantiza un camino exitoso y lleno de aprendizajes para cualquier negocio.
En América Latina tenemos un trayecto largo aún por recorrer pero estamos ya en ruta y algunos datos son muy positivos. Por ejemplo, según un estudio elaborado por BID Lab en colaboración con Santander X, las mujeres emprendedoras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM) han tenido un importante crecimiento en la región, de hecho 54% de ellas ha levantado capital de inversores ángeles o capital emprendedor y cerca del 80% planea expandir su compañía internacionalmente en los próximos cinco años.
Por otro lado, según la Organización Internacional del Trabajo, en Latinoamérica de 1.269 empresas que cotizan en la bolsa solo el 4,2% tienen directoras ejecutivas, y solo el 7,2% de las mujeres ocupa cargos directivos.
El comercio electrónico es justamente eso, es un área de negocios con una alta posibilidad de formar redes y que como ente empresarial tiene una serie de aristas transversales que tocan otras industrias y generan oportunidades en muchos niveles. Es un ecosistema que se alimenta de las visiones más diversas y en el que nuestra aportación como mujeres y oportunidad de crecimiento es ciertamente muy alentadora.Y estando en este camino, ya no saldremos de aquí.