Communications Construction Company compraría el 30% de la empresa portuguesa.
Por La Estrella
La constructora portuguesa Mota-Engil, que en consorcio con la empresa OHL se adjudicó la extensión de la línea 1 del Metro de Panamá por US$178 millones, estaría concluyendo negociaciones para la venta del 30% de su capital al gigante asiático Communications Construction Company (ACPC), cuyas subsidiarias han sido sujetas a restricciones por el Departamento de Comercio de Estados Unidos, según el diario portugués Publico.
La portuguesa explicó que se encuentra en la etapa final de un acuerdo de asociación estratégica e inversión con uno de los mayores grupos de infraestructura del mundo, con importante actividad a nivel mundial, con el objetivo de convertirse en un accionista relevante y un socio a largo plazo del grupo, destacó el diario.
Mota-Engil no menciona el nombre de la empresa que será su futuro socio, sin embargo, el diario portugués refiere a la constructora china.
La información se produce cuando el Gobierno estadounidense incluyó en la lista de ‘entidades’ a varias subsidiarias de la empresa china por la construcción de islas militares en el mar territorial del país asiático.
Las restricciones del Departamento de Comercio estadounidense obligan a las empresas asiáticas a obtener licencia para exportar y reexportar productos con sus pares estadounidenses.
Juan Antonio Domínguez, empresario de la construcción y expresidente de la comisión de infraestructura de la Asamblea Nacional, advierte que se debe ver con lupa el tema porque existen precedentes de las fuertes acciones que aplica Estados Unidos cuando incluye a una empresa en lista negra.
“Las compañías chinas están en el ojo de la tormenta. Los americanos han puesto su acción en contra de todas aquellas que de alguna u otra forma están involucradas en algún enredo, y entiendo que filiales o partes de estas compañías sí han estado involucradas en actos indebidos”, agregó.
Juan Carlos Araúz, presidente del Colegio Nacional de Abogados y especialista en derecho internacional, está convencido de que las sanciones que impone Estados Unidos tienen un impacto negativo en el comercio mundial.
“No cabe duda que causa afectación a los sancionados y eso de alguna forma podría afectar las relaciones, los contratos, o el cumplimiento de obligaciones que se tengan a mediano y largo plazo”, dijo el abogado.
En el caso de obras y construcciones, el punto de partida será si los proveedores de insumos requeridos estarán dispuestos a mantener sus relaciones en condiciones de normalidad, que permitan cumplir los plazos que exige un contrato, concluyó el abogado.
El 23 de julio de 2019, el Consorcio Línea Panamá Norte formado por OHL y Mota-Engil se adjudicó la extensión del proyecto de movilidad urbana hasta Villa Zaíta.
El proyecto que construirá la portuguesa en conjunto con OHL contará con un viaducto de 2.2 kilómetros y debería estar terminado en 33 meses. La extensión de la línea contará con una estación terminal elevada en el extremo norte de la línea 1, con capacidad para más de 10 mil pasajeros en hora pico, y se conectaría con un intercambiador de buses.
Tras esta ampliación de capital, Mota-Engil Participações, que actualmente ostenta alrededor de dos tercios del capital, tendrá una “participación del 40% en el capital” de la empresa, mientras que el “nuevo accionista alcanzará una participación superior al 30%”.
Según Mota-Engil, la operación fortalecerá las capacidades financieras, técnicas y comerciales de la empresa para incrementar sus actividades en todos los mercados y abrir nuevas oportunidades para desarrollos.
En una primera reacción a este anuncio, los inversores hicieron que las acciones de la constructora se revalorizaran un 15%, mientras que la subida se estabilizó en un 11%.