El color dependiendo de cada tono logra aumentar las palpitaciones de un individuo
Por Revista Summa
El color impregna todos los aspectos de la vida; y en la naturaleza existe gran variedad de colores y tonalidades; y cada uno de ellos afecta las emociones de manera distinta, debido a que el color es capaz de estimular o crear diferentes emociones; y dan forma a la manera en que una persona percibe el mundo.
Sin embargo, a menudo las personas dudan en incorporar el color en sus vidas, ya que sienten temor de usarlos; sin recordar que el color tiene el poder de comunicar sentimientos y benefician la salud y la mente de una persona.
Luigina Campos experta en imagen explica que “vivir la vida a colores te cambia la perspectiva para siempre, el color al ser luz es energía, y ésta eleva nuestras emociones. Podemos sentirnos tristes o agobiados por alguna razón y al vestir de color o decorar nuestro hogar con colores, empezamos a sentir su energía positiva y a beneficiarnos de sus bondades, sintiéndonos mejor, ya que el color es terapia”.
“El color tiene estructura y función, la estructura hace referencia a que todos colectivamente sentimos lo mismo hacia un color en particular por el inconsciente colectivo y lo que esto evoca. En cuanto, a la función es la apreciación subjetiva que cada uno tiene de acuerdo con lo que ha vivido y experimentado del color en su vida, su pasado, sus historias. Por lo tanto, cuando vemos un color los recuerdos nos empiezan a activar las emociones. De esta manera el color es capaz de ayudarnos a sentirnos mejor, darnos poder, sentirnos fuertes, alegres, vivos, y esto también se transmite al que lo ve y creamos una energía compartida”, agregó Campos.
Bondades de incorporar color en la vida
Con relación a las bondades que aporta el color en las vidas de las personas, se puede mencionar que ayudan a la persona a sentirse feliz o mejor y a aportarle energía, paz, calma, entre otras emociones positivas.
El color dependiendo de cada tono logra aumentar las palpitaciones de un individuo, tal es el caso del rojo. El amarilla aporta creatividad y jovialidad. Si la persona viste o decora su hogar de rosado, creará una energía más dulce, más romántica. En el caso del verde, éste aporta equilibrio y paz, y el azul transmite tranquilidad.
“Todos estos mensajes, que los colores comunican; el cerebro los codifica y empieza formarse juicios de valor que pueden hacerme pensar que esa persona es más ordenada, atenta, alegre, entre otros”, comentó Campos.
¿Cómo podemos vivir una vida de color?
Para vivir una vida a color, la experta recomienda que use el color que más le vaya a su piel, que busque colores lisos para empezar y que defina cuál es su objetivo tanto en lo profesional como lo social, sin olvidar determinar la industria para la que trabaja.
En el caso de que la persona que se dedique a una industrias más rígida y quiere crear más accesibilidad, se aconseja busque colores como el verde, azul y blanco, ya que serán opciones muy favorecedoras. Pero, si se trata de una industria más accesible como el área de publicidad, moda o belleza, innovar con colores más alegres como los corales, menta o fucsia serán opciones muy agradables para mostrar creatividad.
“Finalmente, la persona puede incorporar el color poco a poco, y no tenga miedo, salga de su zona de confort, si hay un color que le gusta y no lo tiene en su armario, intente incorporándolo. Hágase un estudio de color interno y externo para saber cuáles colores conectan mejor con su piel y su ser interno”, mencionó Campos.
Si desea conocer más del tema, la experta estará impartiendo un Webinar gratuito llamado ¡Viví la vida a color!, el próximo 26 de mayo a las 7: 00 p.m